Cómo mejorar el código de conducta de empresa
La confianza es importante en todas las relaciones, y todavía lo es más en un entorno de trabajo. El código de conducta de empresa es la herramienta ideal para construirla. Un buen código de conducta genera una atmósfera de compromiso en la organización y potencia relaciones firmes entre esta y una variedad de partes interesadas, incluidos los empleados, proveedores, clientes y el público en general.
Un código efectivo define los valores que impulsan las acciones y los principios para la toma de decisiones en la organización. Establece una base cultural sólida para el negocio y además ayuda a las organizaciones a aplicar e implementar políticas y procedimientos legales y éticos adecuados.
Este código de conducta de empresa debe ser un documento dinámico, que se ajuste a una realidad siempre cambiante y a las necesidades crecientes de cumplimiento. Por ello, debe ser reevaluado y reeditado de forma periódica hacia la mejora continua.
Mejorar el código de conducta de empresa
Definir qué puntos se incluyen en un código de conducta de empresa dependerá de cada organización y su realidad. Pero lo que siempre se puede mejorar de un código, más allá de su contenido específico, es que esté construido de modo que pueda llegar a todos sus empleados o partes interesadas.
Para lograr inculcar las mejores prácticas definidas en el código en cada rincón de la organización, se puede recurrir a las siguientes recomendaciones:
Utilizar un formato que se ajuste a las características y necesidades de los empleados
La mayoría de las organizaciones confían en un código de conducta de un solo documento y esto generalmente es apropiado y cómodo. Pero a veces otro enfoque también puede ser interesante. La cuestión es ajustarse lo máximo posible a cada circunstancia si estas varían de manera notable dentro de una misma organización.
Desde ese punto de vista, muchas organizaciones, de carácter multinacional, utilizan diversas versiones del código, teniendo un documento como base. Así pueden acomodarlo a la cultura, el idioma y las costumbres de otras regiones. Otras veces, una gran empresa puede desarrollar una versión ligeramente diferente de su código base para unidades de negocios que atienden diferentes mercados. O también es posible hacer algo así para diferentes partes interesadas: contratistas, agentes, proveedores, comunidad…
Incorporar un concepto unificador
Los mejores códigos de conducta de empresa incorporan un concepto multifacético que impregna el documento. Este concepto aparece generalmente en el título y también se distribuye en la estructura, las secciones y subtítulos.
Este concepto ayuda a unificar los temas dispares del código, alinea el documento con el objetivo de negocios de la organización y, muchas veces, lo conecta con su cultura ética. De este modo, puede reflejar la identidad o marca de cumplimiento de la empresa.
Un concepto unificador, así construido, facilita que el contenido del documento sea absorbido por los que lo leen y le otorguen un valor muy superior a la mera palabrería documental.
Establecer un tono aspiracional
La mayoría de las personas no responden bien a una lista de lo que no se debe hacer. Esto también ocurre con un código de conducta. Una forma de mejorar el código es emplear el enfoque contrario, establecer un tono aspiracional, afirmativo e inspirador.
Este tono conecta a los empleados con el éxito de la organización y de ellos mismos. Ayuda a que los empleados aprecien el documento y el papel que desempeña el cumplimiento.
Abordar los riesgos de la organización con respecto a la conducta empresarial
Un código de conducta de empresa sirve como herramienta principal para abordar el riesgo comercial. El riesgo puede ser cualquier actuación que conduzca a una vulneración legal o impida que la organización cumpla con sus objetivos identificados de ética y cumplimiento afectando a su reputación.
Los riesgos pueden ser cientos y variados. Pero la organización debe identificar y priorizar los problemas potenciales. Así podrá encontrar el equilibrio adecuado de cada tema dentro del código de conducta.
Incorporar un estilo de escritura efectivo
Si un código está bien escrito, tendrá una fuerte influencia en la aceptación y la comprensión de los empleados. Como mínimo, el código debe estar libre de errores de puntuación o gramática. El estilo de escritura debe ser consistente y alinearse con las pautas de estilo de la organización.
Además, debe ser un documento fácil de leer, con oraciones cortas y términos sencillos de comprender. El nivel de escritura debe ajustarse a su audiencia y puede emplear léxico especializado de su propia industria o sector.
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Ajustar el código de conducta de empresa a la situación de la organización valorando sus riesgos principales es más sencillo cuando se cuenta con una solución tecnológica como esta, que permite un mayor control del sistema.
